miércoles, 31 de marzo de 2010

11 pasos para enseñarle a tu niño o niña a ir al baño



Nos ha gustado mucho esta mención a 11 pasos a seguir para enseñarle a tu niño a ir al baño, pero siempre entendiendo que hablamos de niños antes de 5-6 años que no han desarrollado Enuresis, y queremos que los conozcas:

• Primer paso: Identifica las señales de que tu niño está listo 

• Segundo paso: Compra el equipo necesario 

• Tercer paso: Crea una rutina para tu niño 

• Cuarto paso: Dile adiós al pañal 

• Quinto paso: Muéstrale cómo se hace 

• Sexto paso: Explícale el proceso 

• Séptimo paso: Motívalo a ser independiente 

• Octavo paso: Compra pantaloncitos de entrenamiento 

• Noveno paso: Acepta sus deslices con buen humor 

• Décimo paso: Comienza el entrenamiento nocturno 

• Onceavo paso: Celébralo, ¡lo has conseguido!



Una de las etapas del desarrollo de los niños que los padres suelen esperar con ansiedad es el momento de quitarles el pañal.

Después de haber cambiado cerca de dos mil pañales al año (es cierto, calcula unos 6 al día), seguramente no veas la hora en que tu pequeño empiece a ir al baño solito.
Lo que pocos mamás y papás saben es lo mucho que se puede tardar.

Y aunque es verdad que algunos niños aprenden en pocos días, también es cierto que muchos otros tardan varios meses.
La posibilidad de que logres enseñarle a tu hijo con éxito aumentará si aprendes las reglas básicas del entrenamiento, y logras transmitírselas con claridad a tu niño. 

Pero si este no es tu caso, y quieres saber exáctamente cómo abordarlo, te recomendamos que escribas a nuestra pediatra especializada la Doctora Rocío Santiago.

martes, 23 de marzo de 2010

¿Cómo se puede enseñar a controlar la micción?


¿Cómo se puede enseñar a controlar la micción?
El mejor momento para que un niño aprenda el control de la micción es tras haber conseguido el control de las deposiciones. Se puede empezar quitando los pañales durante el día, estando atentos a las posibles señales que el niño tiene cuando su vejiga está llena (retorcerse, cruzar las piernas, etc...). Cuando esto suceda deben de llevar al niño al servicio, utilizando un orinal o un adaptador del w.c. También se deben fijar unas horas al día para llevarle al servicio. Es recomendable que retire los juguetes de este espacio para evitar la distracción del niño.

¿Qué hacer si su hijo tiene mas de cinco años y sigue mojando la cama?
En primer lugar lo primero que se debe de hacer es acudir a su pediatra, para que valore si puede tener algún problema orgánico. A continuación pueden leer una lista de actividades que puede ayudar a los niños con este problema:
- Desdramatizar el problema.
- Retirada brusca del pañal
- El niño debe ser consciente de las cantidades de líquido que bebe: beber de forma regular a lo largo del día le ayudará a tener un mejor control de su capacidad vesical. No beber dos horas antes de irse a la cama. Y desde luego evitar ciertas bebidas como: café, té, bebidas gaseosas.
- Realizar actividades para mejorar la capacidad vesical: durante el día ir al baño en cuanto se siente la necesidad de orinar. Aumentar el número de bebidas durante el día. Anotar el número de veces que se orina durante el día. Una vez que se ha conseguido lo anterior, deberá de intentar posponer la micción durante unos minutos, que irá posteriormente alargando.
- Pensar de forma positiva: es muy importante que el niño se acueste pensando de forma positiva, intentando evitar el pensar que va a mojar la cama. Por lo tanto se debe distraer al niño con otros temas.
-Ducharse por la mañana los días que moje la cama (se asume que generalmente los niños se bañan por la noche).
-El niño deberá cambiar sus sábanas y el pijama mojados.

Cualquier consulta que tengas a este respecto, puedes hablar con nuestra pediatra Rocío Santiago, además, tendarás más información sobre la enuresis en nuestra web principal.

martes, 16 de marzo de 2010

El 21% de niños españoles se orina en la cama


Uno de los momentos más bochornosos para un niño es que la madre o alguien descubra que las sábanas de la cama se encuentran mojadas, obviamente por un accidente urinario y, vaya que esto no es cosa rara, ya que el 20 por ciento de niños en el mundo sufre de este problema.

En España el índice de niños que tienen problemas de incontinencia urinaria es muy parecido ya que está en un 21 por ciento, siendo este un problema ya que según los pediatras un niño debe tener control de sus actividades urinarias a partir de los 5 años, y es por eso que se le denomina una disfunción urinaria ya que los casos se dan a partir de los 5 años hasta los 15 años.

Generalmente el origen del problema es un desorden fisiológico, el mismo que puede ser solucionado con un debido tratamiento con medicamentos.

Otro factor puede ser un problema psicológico ante ciertas presiones, para solucionar esto obviamente se debería recurrir a un psicólogo para que encuentre el meollo del problema.

Este problema debe ser controlado con rapidez pues suele afectar el autoestima del niño y ello puede limitar su desarrollo emocional.

Cualquier duda que tengas sobre el problema de la enuresis consulta con nuestra pediatra especializada Rocío Santiago.

martes, 2 de marzo de 2010

Más cifras de la enuresis


El control de esfínteres es un logro muy importante para la independencia de los niños y niñas, su entrada a la escuela y una mayor aceptación familiar y social y generalmente ocurre entre los 3 y 4 años de edad.

El aprendizaje y el control de esfínteres es gradual, primero empieza con el control rectal nocturno, continúa con el control rectal diurno y posteriormente los niños consiguen la continencia urinaria diurna y nocturna.

En términos generales se puede decir que la mitad de los niños y niñas, logran controlar su esfínter de la micción, a los dos años, un 75% lo han alcanzado a los 3 y para los 5 años el 90%, logra avisar cuando tiene ganas de ir al baño y se mantiene seco hasta que llega al baño. sin embargo un buen número de niños y niñas no lo logran y esto es motivo de preocupación por parte de los padres.

La enuresis o incontinencia urinaria, es la falta de control del esfínter o músculo que controla la micción con la consecuente pérdida incontrolada de orina a una edad en la cual debería haber adquirido el control y aunque habitualmente este problema desaparece con el tiempo, lo que sugiere que para muchos este problema puede formar parte del desarrollo madurativo del niño, para muchos puede significar un problema emocional mucho más grande de lo que se piensa.

Aunque la edad en la que los niños y niñas empiezan a tener control sobre el esfínter urinario es variable, se considera que padecen enuresis, los que de forma involuntaria e inconsciente y sin tener ningún problema orgánico no logran controlarlo durante la noche siendo mayores de 4 años, o durante el día si son mayores de 2 años y medio que se orinan durante el día.

Este problema es más frecuente en niños que en niñas, quienes en general tardan más en poder controlar los esfínteres, tanto de la micción como de la defecación.

Independientemente de cuándo se produce y de la cantidad del volumen que se “escape”, la incontinencia ocasiona gran angustia no solo al niño/a sino también a quienes conviven con ellos.

Es importante entender que el escape de orina ocasional puede formar parte del desarrollo y crecimiento del niño y que el tratamiento es posible en la mayoría de los niños que tienen dificultad en controlar sus vejigas.

La vejiga está compuesta por 2 tipos de músculos: el detrusor, que forma como un saco muscular que almacena la orina y que se tiene que contraer para vaciar su contenido y un grupo de fibras musculares que adoptan una forma circular localizadas en el cuello de la vejiga que automáticamente se contrae para mantener la orina dentro de la vejiga y que, también de forma automáticamente se relajan cuando el detrusor se contrae pasando la orina hacia la uretra. Existe un tercer grupo de músculos ubicados por debajo de la vejiga que pueden contraerse para guardar la orina en su reservorio.
En el bebé, una vez que la vejiga alcanza su máxima capacidad, se contrae automáticamente y se vacía. Con el crecimiento y maduración del sistema nervioso, el cerebro comienza a recibir mensajes de que la vejiga se va llenando y envía mensajes hacia la vejiga para que retenga la orina hasta que el niño/a decida en que momento y lugar vaciar su contenido. Este proceso, llamado continencia, se presenta en tiempos diferentes en cada persona y depende de muchos factores. Cualquier falla en el mecanismo de continencia, puede ocasionar escapes de orina o incontinencia.

La mayoría de los niños adquieren la continencia diurna y nocturna alrededor de los 5 años, se estima que a esta edad el 85% de los niños son continentes por el día la noche. A los 10 años el 5% de los niños presenta episodios de incontinencia y solo es del 1% a los 18 años. Es más frecuente en niños que en niñas